Todos queremos que nuestros niños crezcan sanos y fuertes. Queremos que sean adultos responsables y buenas personas. Sin embargo, esto no sucede de la noche a la mañana. Enseñar a un niño a ser responsable es un proceso que implica acompañamiento y paciencia.
¿No vamos a poner al niño de 2 años en la cocina sin supervisión o al de 4 a hacer las compras, cierto? Cada etapa conlleva diferentes responsabilidades. En este artículo te comparto una lista de responsabilidades por etapa.
2-3 años
Actividades simples y claras.
- Ordenar sus juguetes y ponerlos en su lugar.
- Comer solo
- Tirar las cosas en la basura
- Regar las plantas (con supervisión)
4-5 años
Actividades sencillas donde los podamos soltar poco a poco.
- Aseo personal
- Darle de comer a la mascota
- Ayudar a hacer la lista del supermercado
- Preparar la ropa para el día siguiente
6-7 años
Capaz de seguir órdenes sin ningún problema.
- Sacudir el polvo de los muebles
- Ayudar con la lista de las compras
- Separar la ropa para lavar
- Llevar algunas bolsas de la compra
8-9 años
Más independiente y más organizado.
- Preparar platos sencillos en la cocina, como un sándwich (con supervisión)
- Ordenar clóset y cajones
- Cuidado y aseo de la mascota
- Limpiar el suelo y otros quehaceres
Involucrar poco a poco a los niños en las tareas del hogar ayuda a los niños a ser más disciplinados e independientes. Además, facilita la instauración de hábitos, fortalece la capacidad de organización y fomenta el trabajo en equipo.
Recuerda que requiere paciencia, acompañamiento y, lo más importante, dar un buen ejemplo.
Cuéntanos en los comentarios cómo involucras a tu peque en las tareas del hogar.
Tip: Respira profundo. Los niños poco a poco aprenden por observación, pero también aprenden jugando. Asigna las responsabilidades poco a poco.
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